miércoles, 1 de junio de 2011

Elecciones: Pretende llegar a octubre con lista de adhesión: Ricardo Bruzzese; el precandidato que riega el temor del oficialismo


Podría ser el único peronista de La Matanza que lleve lista de adhesión en octubre. En su sector confían en que la licuación de votos hará bajar el nivel de Fernando Espinoza. En octubre “no gana Bruzzese, pierde Espinoza”, se atreven.
Si algo no le falta a Ricardo Bruzzese es la confianza en sí mismo, esa virtud que en grandes
dosis puede transformarse en excesivo ego. Aunque fundamenta su estado emocional cuando relata los últimos acontecimientos políticos que le tocaron vivir. En sus oficinas de San Justo, como muestra, se ven afiches con su imagen junto a la Presidenta por todos lados; y en el escritorio reposa un portarretratos que lo muestra junto al gobernador Daniel Scioli. Precisamente una mezcla que se transforma en la fórmula que lo desvela.
Una de las formas de pagar derecho de piso en La Matanza es mostrar, y Bruzzese ya lo hizo. Armó un acto de miles en el Club Huracán de San Justo, empapeló el distrito con su imagen, cubrió las paredes con su apellido, consiguió un rodaje mediático nacional cuando apadrinó el programa Carne Para Todos, y hasta se hizo tiempo para ponerse los cortos junto a Scioli.
Este empresario ostentoso salido de un barrio humilde de La Matanza, logró un posicionamiento inimaginable para el oficialismo. En un rápido paneo entre todos los candidatos que aparecieron en el distrito, Ricky -así lo llaman los suyos- aparecía como uno de esos muchos dirigentes que
surgen con cada elección en este territorio para luego cerrar filas con el mejor postor. Sin embargo, la nueva escena política le hizo lugar y se convirtió en migraña para el gobierno de Fernando Espinoza.
El nuevo mecanismo electoral que deja atrás las candidaturas exclusivas a las que estaba
acostumbrado el PJ de La Matanza, vino a quebrar el divismo del intendente Espinoza. El arrastre que pueda ejercer Cristina Fernández -en caso de presentarse como candidata a la reelección- ya no sería un efecto para un único benefactor. En las trincheras bruzzesistas esperan que la Presidenta ampare su postulación bajo una lista de adhesión, la mejor manera de llegar a octubre sin tropiezos.
En esas instancias no sería Bruzzese el encargado de limar los votos de la oposición, por el contrario, coaccionaría contra el justicialismo gobernante bajando el porcentual de votos espinozistas.
Reconocido por propios, el mayor peligro que enfrenta hoy el jefe comunal es perder la gobernabilidad en caso de que le arrebaten el Concejo Deliberante. Aunque los más entusiastas se animan a decir que a esta altura podría estar comprometido hasta el triunfo del oficialismo. Esto mirando el último caudal de votos recogido por el intendente, en 2009, con una proyección
que -por desgaste de gestión y fricciones internas- lo llevaría a bajar su nivel.
En la cresta de esa ola se sube el empresario kirchnerista. En su círculo de colaboradores se
atreven a arriesgar que en octubre “no gana Bruzzese, pierde Espinoza”, casi un retruécano que sintetiza la confianza que invade a ese espacio.
Más allá de los cálculos matemáticos que se combinan con todavía pocas certezas, Ricardo Bruzzese está dispuesto a no dar marcha atrás en su decisión de ir por la intendencia matancera. Y sólo podría quebrar sus deseos una orden presidencial. Esa misma mano que todavía no bendijo a ninguno.
El precandidato a intendente Ricardo Bruzzese se mostró ahora junto al gobernador Daniel Scioli. Después de aparecer varias veces con la presidenta Cristina Fernández, el empresario sigue exponiendo buena llegada con el kirchnerismo.
Por Claudio Kappeler.-
Fuente: Diarionco

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