El diputado dijo que la Presidenta se lanzará el 23 de junio. Desde Italia, el vocero lo desmintió. Cruces oficiales que suman misterio.
El viento no sopla sin que ella lo ordene. El celo en las decisiones y el manejo de la información son una marca de fábrica del kirchnerismo. Pero aquel hermetismo se exacerbó tras la muerte de Néstor.
La Presidenta decide en la soledad de su conciencia el qué, cómo y cuándo de las cuestiones más importantes a los detalles más nimios de gestión. Y guay con el que crea que puede anticiparse a sus tiempos.
No se salva nadie de los enojos presidenciales. Ni siquiera un hombre del núcleo duro del kirchnerismo como Carlos Kunkel. Ayer, el diputado tuvo la mala idea de dar por hecho en un reportaje la candidatura de Cristina a la reelección.
Agregó que el lanzamiento sería "seguramente el 23 de junio", aunque se apoyó en "versiones periodísticas" para arriesgar esa fecha. Y aseguró, en la misma nota por radio La Red, que el compañero de fórmula "será un peronista" que se conocerá ese mismo día.
Ante la falta de confirmación oficial sobre la candidatura de la Presidenta - que todo el oficialismo da por descontada - y mucho menos sobre los detalles de su lanzamiento, las palabras de Kunkel fueron tomadas por un dato definitiva.
Más, cuando muchos recordaron que él había sido el primero en filtrar a la prensa en 2005 que Cristina competiría por una banca de senadora y, luego, en 2007, volvió a anticipar que ella, y no Néstor, sería la candidata a Presidenta.
Ayer, sin embargo, parece que habló más de la cuenta. Y la Presidenta mandó a callarlo con una operación de pinzas al máximo nivel.
Desde Roma, el subsecretario de Comunicación que oficia de vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, se presentó ante los periodistas que cubren la gira presidencial para una de sus escasísimas declaraciones públicas. "La presidente Cristina Kirchner no necesita jefe de campaña, ni exégetas ni intérpretes", informó. "Cuando la Presidente decida lo que tenga que decidir lo va a hacer ella", agregó tajante.
Desde Buenos Aires, se sumó el jefe de Gabinete. "Desmiéntalo a Kunkel, primero porque no está autorizado y segundo porque la Presidenta no se ha expedido en ese sentido", lo cruzó por radio 10. "Lo siento por Carlos (Kunkel) pero está diciendo algo de su pura cosecha y no tiene que ver con lo que la Presidenta piensa", continuó la desautorización. Aníbal F. insistió en que Kunkel no era el "jefe de campaña" y que "no hay nadie que pueda exhibir, esgrimir o hacer conocer fechas o personas en nombre de la Presidenta, porque ella no se ha expresado nunca en ese sentido".
La crudeza de ambas desmentidas que, según se pudo saber, fueron coordinadas por la Presidenta desde Italia, contrastan con el fondo del asunto: todos los funcionarios consultados ayer por este diario manejaban información similar a la de Kunkel.
Hace meses que se baraja la posibilidad de que Cristina anuncie su candidatura a la reelección en las cercanías del fin de semana del Día de la Bandera, sobre el límite legal del 25 de junio. Y que, como otras veces, elegiría hacerlo en el Teatro Argentino de La Plata. Ayer, en la capital provincial, afirmaban que la sala aún no fue reservada.
Pero, al mismo tiempo, admitían que está liberada para esas fechas y admitían que el lanzamiento de la fórmula podría ser en simultáneo con la de Daniel Scioli para la gobernación. Ayer nomás, al mismo tiempo que desmentía a Kunkel, el jefe de Gabinete reiteraba que "no queda otra opción que no sea Cristina" la candidata del oficialismo.
Las especulaciones sobre su compañero de fórmula parecen acotadas hoy a una lista integrada por Amado Boudou, Juan Manuel Abal Medina, Sergio Urribarri, Carlos Zannini y Julián Domínguez. Cualquier otro nombre sorprendería incluso a sus más íntimos. Todos, mal que bien, pueden considerarse dentro del amplio paraguas del "peronismo" y nadie duda de su absoluta fidelidad a la Presidenta, cualidades a las que se refirió Kunkel.
No debería haber motivos para una desmentida tan brutal como la de ayer. Pero aquel mensaje dirigido a Hugo Moyano vale para todos. A Cristina no le gusta que la corran.
No se salva nadie de los enojos presidenciales. Ni siquiera un hombre del núcleo duro del kirchnerismo como Carlos Kunkel. Ayer, el diputado tuvo la mala idea de dar por hecho en un reportaje la candidatura de Cristina a la reelección.
Agregó que el lanzamiento sería "seguramente el 23 de junio", aunque se apoyó en "versiones periodísticas" para arriesgar esa fecha. Y aseguró, en la misma nota por radio La Red, que el compañero de fórmula "será un peronista" que se conocerá ese mismo día.
Ante la falta de confirmación oficial sobre la candidatura de la Presidenta - que todo el oficialismo da por descontada - y mucho menos sobre los detalles de su lanzamiento, las palabras de Kunkel fueron tomadas por un dato definitiva.
Más, cuando muchos recordaron que él había sido el primero en filtrar a la prensa en 2005 que Cristina competiría por una banca de senadora y, luego, en 2007, volvió a anticipar que ella, y no Néstor, sería la candidata a Presidenta.
Ayer, sin embargo, parece que habló más de la cuenta. Y la Presidenta mandó a callarlo con una operación de pinzas al máximo nivel.
Desde Roma, el subsecretario de Comunicación que oficia de vocero presidencial, Alfredo Scoccimarro, se presentó ante los periodistas que cubren la gira presidencial para una de sus escasísimas declaraciones públicas. "La presidente Cristina Kirchner no necesita jefe de campaña, ni exégetas ni intérpretes", informó. "Cuando la Presidente decida lo que tenga que decidir lo va a hacer ella", agregó tajante.
Desde Buenos Aires, se sumó el jefe de Gabinete. "Desmiéntalo a Kunkel, primero porque no está autorizado y segundo porque la Presidenta no se ha expedido en ese sentido", lo cruzó por radio 10. "Lo siento por Carlos (Kunkel) pero está diciendo algo de su pura cosecha y no tiene que ver con lo que la Presidenta piensa", continuó la desautorización. Aníbal F. insistió en que Kunkel no era el "jefe de campaña" y que "no hay nadie que pueda exhibir, esgrimir o hacer conocer fechas o personas en nombre de la Presidenta, porque ella no se ha expresado nunca en ese sentido".
La crudeza de ambas desmentidas que, según se pudo saber, fueron coordinadas por la Presidenta desde Italia, contrastan con el fondo del asunto: todos los funcionarios consultados ayer por este diario manejaban información similar a la de Kunkel.
Hace meses que se baraja la posibilidad de que Cristina anuncie su candidatura a la reelección en las cercanías del fin de semana del Día de la Bandera, sobre el límite legal del 25 de junio. Y que, como otras veces, elegiría hacerlo en el Teatro Argentino de La Plata. Ayer, en la capital provincial, afirmaban que la sala aún no fue reservada.
Pero, al mismo tiempo, admitían que está liberada para esas fechas y admitían que el lanzamiento de la fórmula podría ser en simultáneo con la de Daniel Scioli para la gobernación. Ayer nomás, al mismo tiempo que desmentía a Kunkel, el jefe de Gabinete reiteraba que "no queda otra opción que no sea Cristina" la candidata del oficialismo.
Las especulaciones sobre su compañero de fórmula parecen acotadas hoy a una lista integrada por Amado Boudou, Juan Manuel Abal Medina, Sergio Urribarri, Carlos Zannini y Julián Domínguez. Cualquier otro nombre sorprendería incluso a sus más íntimos. Todos, mal que bien, pueden considerarse dentro del amplio paraguas del "peronismo" y nadie duda de su absoluta fidelidad a la Presidenta, cualidades a las que se refirió Kunkel.
No debería haber motivos para una desmentida tan brutal como la de ayer. Pero aquel mensaje dirigido a Hugo Moyano vale para todos. A Cristina no le gusta que la corran.
Fuente: LosAndes
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